Procesador (CPU):
El procesador es el cerebro de la computadora, ejecuta instrucciones y procesa datos.
Los tipos de procesador son los diferentes modelos y características de las unidades centrales de procesamiento (CPU) que existen en el mercado. Los procesadores son los componentes que se encargan de ejecutar las instrucciones y operaciones de los programas y aplicaciones en los dispositivos electrónicos, como ordenadores, teléfonos, tablets, etc.
Los procesadores se pueden clasificar según varios criterios, como el fabricante, la arquitectura, el número de núcleos, la frecuencia de reloj, el consumo energético, el zócalo, la memoria caché, etc. Algunos de los fabricantes más conocidos son Intel y AMD, que compiten por ofrecer los mejores procesadores para diferentes tipos de dispositivos y usos.
La arquitectura de un procesador se refiere al diseño y la organización de sus circuitos internos, que determinan su capacidad de procesamiento y su compatibilidad con otros componentes. Algunas de las arquitecturas más comunes son x86, x64, ARM, RISC-V, etc.
El número de núcleos de un procesador indica la cantidad de unidades de procesamiento independientes que tiene. Cada núcleo puede ejecutar una o varias instrucciones simultáneamente, lo que mejora el rendimiento y la velocidad del procesador. Los procesadores pueden tener desde un solo núcleo hasta 16 o más núcleos, dependiendo de su gama y su finalidad.
La frecuencia de reloj de un procesador mide la velocidad a la que realiza los ciclos de procesamiento, es decir, las operaciones por segundo. Se expresa en megahercios (MHz) o gigahercios (GHz), siendo un gigahercio equivalente a mil megahercios. A mayor frecuencia de reloj, mayor velocidad y potencia del procesador, pero también mayor consumo energético y generación de calor.
El consumo energético de un procesador se refiere a la cantidad de energía eléctrica que necesita para funcionar. Se mide en vatios (W) y depende de la frecuencia de reloj, el número de núcleos, la arquitectura y el proceso de fabricación del procesador. A menor consumo energético, mayor eficiencia y menor impacto ambiental del procesador.
El zócalo de un procesador es el conector que permite unirlo a la placa base del dispositivo. Cada procesador tiene un zócalo específico que debe coincidir con el de la placa base para que sea compatible. Algunos de los tipos de zócalo más habituales son LGA, PGA, BGA, etc.
La memoria caché de un procesador es una memoria de acceso rápido que almacena temporalmente los datos e instrucciones más utilizados por el procesador, para evitar tener que acceder a la memoria principal, que es más lenta. La memoria caché se divide en niveles (L1, L2, L3, etc.), siendo el nivel L1 el más rápido y el más cercano al núcleo del procesador. A mayor tamaño y número de niveles de la memoria caché, mayor rendimiento del procesador.
Memoria RAM:
La RAM (Random Access Memory) almacena temporalmente datos y programas en uso para un acceso rápido por parte del procesador.
Existen varios tipos de memoria RAM, clasificados por su tecnología, velocidad y características. Aquí hay una lista de algunos tipos comunes:
- DRAM (RAM dinámica): Es el tipo más común de RAM. Se subdivide en:
- SDRAM (DRAM síncrona): Sincroniza su velocidad con el reloj del sistema.
- DDR SDRAM (Double Data Rate Synchronous DRAM): Mejora el rendimiento al transferir datos en ambos flancos de la señal de reloj.
- DDR2, DDR3, DDR4, DDR5: Son evoluciones de la DDR SDRAM, cada una ofreciendo mejoras en velocidad y eficiencia energética.
- SRAM (RAM estática): Es más rápida que la DRAM pero más costosa, se utiliza en cachés y otros usos donde se necesita velocidad y acceso rápido.
La velocidad de la RAM mide entre megahercios (MHz) o gigahercios (GHz). Por ejemplo, DDR4-3200 significa que la RAM tiene una velocidad de 3200 MHz. Además, se puede medir el ancho de banda, que se expresa en gigabytes por segundo (GB/s), siendo un indicador de la cantidad de datos que la RAM puede procesar en un segundo.
La potencia de la RAM se mide en voltios (V) y está relacionada con el consumo energético. Cuanto menor sea el voltaje, menor será el consumo de energía y la generación de calor, lo que puede ser beneficioso para la eficiencia energética y la temperatura interna de la computadora.
Es esencial considerar la compatibilidad de la RAM con la placa madre, ya que no todas las placas admiten todos los tipos y velocidades de RAM.
Disco Duro o SSD:
Almacena permanentemente datos, programas y el sistema operativo de la computadora. Los tipos principales de dispositivos de almacenamiento son los discos duros (HDD, por sus siglas en inglés) y las unidades de estado sólido (SSD, por sus siglas en inglés) se clasifican en:
Discos Duros (HDD):
- HDD convencionales: Utilizan discos magnéticos giratorios para almacenar datos.
- HDD Híbridos (SSHD): Combinan la capacidad de almacenamiento de un HDD con una pequeña porción de almacenamiento SSD para mejorar el rendimiento.
- HDD de estado sólido (SSD): Aunque son menos comunes, algunos modelos de HDD han incorporado una pequeña cantidad de memoria flash para mejorar la velocidad.
Unidades de Estado Sólido (SSD):
- SSD SATA: Utilizan la interfaz SATA, ofrecen velocidades más rápidas que los HDD convencionales pero son más lentos que otros tipos de SSD.
- SSD NVMe (Non-Volatile Memory Express): Utilizan una interfaz PCIe (Peripheral Component Interconnect Express) para velocidades extremadamente altas, ideales para sistemas que requieren una gran velocidad de lectura/escritura.
La velocidad de los discos duros y SSD se mide en dos parámetros principales:
- Velocidad de lectura y escritura: Indica cuán rápido se pueden leer o escribir datos. Se mide en megabytes por segundo (MB/so Mbps).
- Latencia: Se refiere al tiempo que tarda una unidad en responder a una solicitud. Se mide en milisegundos (ms). Menor latencia significa una respuesta más rápida.
La potencia de los discos duros y SSD se mide principalmente en términos de consumo energético. Los SSD tienden a consumir menos energía que los HDD, lo que puede ser beneficioso para la duración de la batería en dispositivos portátiles y para la eficiencia energética en general.
La elección entre un HDD y un SSD generalmente depende de las necesidades individuales, donde los SSD tienden a ser más rápidos pero pueden ser más costosos por gigabyte en comparación con los HDD, que ofrecen una mayor capacidad de almacenamiento a un precio más bajo.
Tarjeta madre (Placa base):
Las tarjetas madre, también conocidas como placas base, tienen distintos tipos y variaciones, cada una diseñada para diferentes tipos de procesadores, puertos y componentes. Aquí tienes algunos tipos comunes:
- ATX (Advanced Technology eXtended): Es el estándar más común. Ofrece una amplia gama de puertos de expansión y conexiones.
- Micro ATX: Más pequeñas que las ATX, pero con menos ranuras de expansión. Son útiles para sistemas compactos.
- Mini ITX: Son aún más pequeñas, ideales para sistemas muy compactos o de factor de forma reducido.
- E-ATX (Extended ATX): Son más grandes que las ATX y ofrecen más ranuras de expansión y conexiones, utilizadas para sistemas de alto rendimiento o estaciones de trabajo.
La velocidad y potencia de una placa base no se miden de la misma manera que otros componentes como la CPU o la memoria RAM. La «potencia» de la placa base se refiere principalmente a su capacidad para manejar y distribuir energía eficientemente a través de sus conexiones y puertos.
En términos de velocidad, la placa base no afecta directamente la velocidad del sistema, pero puede influir en la velocidad de transferencia de datos a través de sus puertos (por ejemplo, velocidades de transferencia de datos USB, velocidades de conexión de red Ethernet, etc. .). Esto se mide en megabytes por segundo (MB/s) o gigabits por segundo (Gbps) dependiendo del tipo de conexión.
La elección de una placa base generalmente se hace según el tipo de procesador que se utilizará, el tamaño deseado para el sistema y las necesidades de conexión y expansión. Es esencial que sea compatible con los demás componentes del sistema, como la CPU, la memoria y las tarjetas de expansión. Conecta todos los componentes de hardware y permite la comunicación entre ellos.
Tarjeta gráfica (GPU):
Procesa y muestra gráficos en la pantalla, es especialmente útil para juegos y aplicaciones de diseño.
Las tarjetas gráficas (GPU) vienen en diversas formas y se clasifican de varias maneras según su arquitectura, rendimiento y uso previsto. Aquí tienes algunos tipos comunes:
- Tarjetas gráficas integradas: Están incorporadas en la placa madre o en el mismo procesador. Son más básicos y se utilizan en computadoras de bajo consumo o para tareas cotidianas que no requieren un rendimiento gráfico intensivo.
- Tarjetas gráficas dedicadas (Discretas):
- Gaming: Diseñadas específicamente para juegos de alta gama, ofrecen un rendimiento gráfico superior y capacidades de procesamiento más potentes.
- Estación de trabajo: Optimizadas para aplicaciones de diseño, modelado 3D y renderizado, proporcionan precisión y rendimiento para tareas profesionales.
- Minería: Diseñadas para minería de criptomonedas, enfocadas en maximizar el rendimiento en cálculos matemáticos para la minería de blockchain.
La velocidad y potencia de una tarjeta gráfica se miden de varias maneras:
- Frecuencia del núcleo (Core Clock): Representa la velocidad a la que funciona el procesador gráfico. Se mide en megahercios (MHz) o gigahercios (GHz).
- Ancho de banda de memoria (Memory Bandwidth): Indica la velocidad a la que la GPU puede acceder y transferir datos desde su memoria. Se mide en gigabytes por segundo (GB/s).
- Unidades de procesamiento (CUDA cores, Stream Processors, etc.): La cantidad de núcleos de procesamiento en la tarjeta, que influye en su capacidad para realizar cálculos gráficos complejos.
- Memoria de video (VRAM): Cuanta más VRAM tenga la tarjeta, más datos pueden almacenar, lo que es crucial para juegos y aplicaciones de renderizado de alta resolución.
La potencia de una tarjeta gráfica se refiere principalmente a su capacidad para realizar cálculos y renderizaciones complejas. Esto se traduce en su capacidad para manejar gráficos intensivos, renderizar imágenes en 3D, ejecutar juegos con altos requerimientos gráficos y realizar tareas de procesamiento paralelo como la minería de criptomonedas.
La elección de una tarjeta gráfica depende del propósito del usuario: juegos, diseño gráfico, trabajo profesional, etc., y de la compatibilidad con la placa base y la fuente de alimentación de la computadora.
Fuente de alimentación:
Suministra energía eléctrica a todos los componentes de la computadora.
Las fuentes de alimentación (PSU, por sus siglas en inglés) tienen diversos tipos y variantes, cada una diseñada para proporcionar energía a los componentes de una computadora. Aquí tienes algunos tipos comunes: